Por: Jesús Amador
Chetumal.- Desde el «exilio» en que ha sido colocado en la nueva era política de Quintana Roo, el panista Mario Rivero Leal insiste en ser candidato a la presidencia municipal de OPB y por tal motivo exige, pide, ruega o solicita a su dirigencia realizar un proceso interno para elegir al panista mejor posicionado ante los pompeyenses.
Aún cuando la cargada de la nueva clase política blanquiazul está a favor del actual diputado Fernando Zelaya, Rivero Leal no se entume y contrario a sumarse a ese proyecto él alza la mano para encabezar una verdadera administración panista, cosa que no ocurre en la actualidad.
La petición de Mario Rivero puede considerarse más que justa si se toma en cuenta que es uno de los principales militantes del PAN en el sur de Quintana Roo. Varios chetumaleños aún recuerdan su rotundo triunfo en las elecciones del 2005 cuando derrotó al priísta Arturo Fernández y obtener la diputación en aquel II distrito electoral.
Luego del contundente triunfo, el famoso «chiquidracula» aprovechó el escaño para cumplir con la encomienda de opositor al anterior sistema político y junto a otros panistas, como el ex senador, Wadi Amar Shabshab, se dio a la tarea de sentar las bases del hoy creciente panismo en la capital del Estado.
Pero tales acciones quizá no sean suficientes para la nueva camada panista, quien sin ápice de gratitud y mucho menos reconocerle su trayectoria, pretende «jubilar» a Mario Rivero.
Sin embargo este tenaz empresario eléctrico chetumaleño no claudica en su sueño de gobernar el municipio de Othon P. Blanco, porque es un anhelo para el cual se ha preparado.
Más que justa es la petición de Rivero Leal en pedir que sea la militancia quien elija al candidato y sería admirable que la dirigencia estatal avale la petición porque el citado personaje cuenta con la solvencia moral y partidista para exigirla.
Entonces, Juan Carlos Pallares Bueno y el resto de la dirigencia debería anteponer los intereses de su militancia por encima de los proyectos de los grupos políticos si es que en verdad pretende consolidar al PAN en Quintana Roo.
Valdría la pena recordarle a Pallares Bueno que Acción Nacional es los principales, sino que el único partido en México, que ha pugnado por la democracia y elegir a sus candidatos a través de convención por delegados o asambleas y no por el clásico dedazo.
Tiempo al tiempo…