Por: Jesús Amador
Chetumal.- La negativa que ayer confirmó el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) para que José Luis Toledo Medina sea candidato a la presidencia municipal de Cancún representa «bocanadas de aíre puro» a los órganos electorales de Quintana Roo, llámese Ieqroo y Teqroo, y también sirvió para reconocer el trabajo del jurista, Eduardo Arreguín, artífice de ponerle los ´puntos y comas´ a la demanda con la cual truncaron las aspiraciones políticas del compadre del ex gobernador, Roberto Borge Angulo.
Ahora que la comedia «Chanito» Toledo ha concluido, es oportuno resaltar el trabajo de los consejeros del Instituto Electoral de Quintana Roo (Ieqroo) y del Tribunal Electoral de Quintana Roo (Teqroo) quienes en su momento recibieron críticas porque mantuvieron la constante de declarar ilegible la candidatura del citado político.
Y vaya que la resolución emitida los órganos electorales quintanarroenses estaba más que sustentada, a tal grado de soportar los embates de más de una decena de ilustres magistrados federales, primeramente los que despachan en la sala de Xalapa y ayer los de la sala Superior.
Ahora que la máxima autoridad electoral ratificó la inelegibilidad de «Chanito» Toledo, además de resaltar el trabajo del Ieqroo, Teqroo y la capacidad del abogado Arreguín, queda descartada la supuesta campaña sucia contra el expriista por parte del sistema político local, rumor que surgió y acrecentó ante la negativa de los órganos electorales locales.
Hoy Quintana Roo cierra otro triste capítulo de su historia política. Hoy los quintanarroenses podemos presumir de contar con instituciones electorales garantes de la legalidad que nos sirven de parapeto contra advenedizos, trácalas y embaucadores que insisten en vendernos «espejitos» en pleno siglo XXI.
Por cierto, a partir de ahora súmele el nombre de Eduardo Arreguín al directorio de juristas ganadores, de los cuales tenemos muy pocos en Quintana Roo, o no Emiliano Ramos?
Tiempo al tiempo…