Por : Jesús Amador
Chetumal.- No hay que perder de vista la meteórica carrera política que labra el joven alcalde de Tulum, Diego Castañón Trejo, porque amén al enorme respaldo popular que le permitió alcanzar con facilidad su reelección, tiene “padrinos” en el primer circulo de la política nacional quienes, indudablemente, lo llevarán del brazo para que continúe su ascenso.
El reemplazo del ex tinto Marciano Dzul Caamal surcó con creces la responsabilidad que concluyó hoy 30 de septiembre. Y a partir de ahora administrará los destinos de Tulum en los próximos tres años, esos que se ganó en las urnas el pasado 2 de junio.
Diego es de esos políticos modernos, con poca labia, tímidon, pero agradable y que escucha a cualquier persona que lo busca para exponerle sus respectivos problemas.
Es innegable que goza de la confianza de la gobernadora Mara Lezama, pero también de gente de la élite política nacional. Ayer sorprendió en su toma de protesta la presencial del presidente de la Cámara de Diputados, el morenita Ricardo Monreal Ávila. Semanas atrás también estuvo por Tulum, el próximo titular de la Secretaria de Seguridad Ciudadana del gobierno de Claudia Sheinbaum, el abogado Omar García Harfuch.
Ante tales situaciones, es indudable que Diego cuenta con margen para trascender, no sólo en la vida política de Tulum, sino también de Quintana Roo y quizá en el plano nacional.
Tiempo al tiempo…