Jesús González
Chetumal.- Mientras que gran parte de la población de Chetumal y sus comunidades cercanas reclaman falta de efectividad en los servicios públicos que otorga el ayuntamiento de Othón P. Blanco, que encabeza el presidente municipal, Otoniel Segovia Martínez; el alcalde capitalino prepara un festejo «fifí» antes de rendir su primer informe de gobierno.
El pretexto perfecto,es el ensayo previo a la sesión solemne de cabildo, donde el presidente municipal, entregará al cabildo la glosa que contiene su primer informe del estado que guarda la administración pública del ayuntamiento de Othón P. Blanco.
Posterior a este ensayo a realizarse a las siete de la noche de este lunes en el domo del parque Alameda, está programada una cena en un lujoso restaurante de comida internacional cercano al monumento a Lázaro Cárdenas; claro está,los gastos irán con cargo a las arcas municipales.
Según datos,el restaurante fue apartado para 30 personas, entre las cuales se contempla al propio alcalde y su esposa así como 15 concejales,la síndico y el secretario general, además de algunos funcionarios (as) allegados a Otoniel Segovia y no podía faltar su fiel escudero,el secretario particular, Luís Gamero Barranco.
Aunque no todo el cabildo ha confirmado su asistencia al ensayo y luego a la cena «fifí», derivado de las diferencias política y en reclamo por el pésimo modo que Otoniel Segovia conduce al ayuntamiento capitalino, hay quienes ya gustosas hasta visitaron el salón de belleza para lucir radiantes en este festejo,en un sitio donde el alcalde ya es cliente asiduo.
Mientras tanto, Chetumal se colapsa en medio de la basura por la ineficiencia recolección,la inseguridad, así como falta de alumbrado público y ahora el reclamo de vendedores semi fijos que por indicaciones del alcalde fueron desalojados de los mercados.
A esto se suman al menos tres investigaciones contra el alcalde y sus allegados en la contraloría municipal y en la fiscalía anticorrupción, aunado a una serie de licitaciones y adquisiciones de servicios y artículos que Otoniel Segovia Martínez, junto con su grupo de allegados pretendían realizar para obtener una jugosa comisión como parte del «diezmo».
Contrario a lo que pregona el presidente de México y Morena con su supuesta austeridad, el alcalde capitalino, además de transportarse en vehículo de lujo, realizar viajes sin justificación y beneficio para el ayuntamiento y hospedarse en caros hoteles, mantiene en el abandono a los empleados dedicados a la recolección de basura, no hay ambulancias para atender emergencias, según por falta de presupuesto para repararlas, y combustible racionado para diversas áreas, ahora frecuenta los pocos restaurantes de lujo de Chetumal,eso sí con cargo al erario.