Por: Jesús González
Chetumal.- La crisis al interior del PRI en Quintana Roo no solamente es política o en torno a la permanencia o no de Raymundo King de la Rosa en la dirigencia estatal, sino también en la cuestión financiera ya que al perder la gubernatura dejaron de recibir los recursos que provenían de las arcas de la administración pública.
Sin que se tenga una cifra exacta de cuánto era lo que ingresaba al PRI y a las bolsas de Raymundo King de la Rosa, fue en su momento Guadalupe Pastrana quien fuera directora administrativa del partido quien reconociera que recibían apoyo del gobierno estatal que en ese entonces era emanado del tricolor en manos del llamado primer priistas del estado, Roberto Borge Angulo.
Ahora, la cuestión financiera aunque sigue siendo un secreto que solamente Raymundo King de la Rosa conoce, ha trascendido que existe una crisis económica al interior lo que ha generado despidos de empleados, reducciones en salarios y pagos de servicios en las distintas oficinas que tiene el tricolor en los diferentes municipios; eso sí, los lujos de su dirigente siguen igual.
Fue el propio Raymundo King de la Rosa quien dijo que actualmente los militantes del PRI no realizan el pago de las cuotas voluntarias que en el caso de los representantes populares emanados del partido en las diputaciones, regidurías y presidencias municipales es obligatoria esa aportación; anteriormente eran las autoridades municipales o administrativos quienes «rasuraban» el salario pero nunca entregaban recibo por lo que ingreso monetario al tricolor será un secreto que se llevarán a la tumba.
La falta de credibilidad hacia Raymundo King ha ocasionado que los militantes no realicen esta aportación ya que el despilfarro económico que realizaba cuando eran gobierno permitiría cubrir los gastos de las sedes estatales y municipales, pero ahora él no ha puesto un solo peso para cubrir los gastos, como es el caso de la sede del tricolor en Benito Juárez que ha quedado expuestos en las reuniones de militantes.
Es tanta la terquedad del líder del PRI en negar que su partido está en crisis y aunque no todo es su culpa tiene gran responsabilidad que osa decir que la falta de aportaciones de los militantes no causa problema y que realmente no hay dificultades; haberse visto tanto cinismo.
Pero además, la opacidad en la que se conduce lo hace negar bajo el pretexto que no tenía el dato a la mano la cifra real de cuánto ingresaba al PRI antes de perder las elecciones y dejar de ser gobierno y ahora cuánto es el dinero que maneja y gasta.
Para este 2017, el PRI obtuvo un monto de 12 millones 296 mil 620.96 pesos del financiamiento público ordinario entregado por el Instituto Electoral de Quintana Roo; a esta cifra le podemos descontar el millón 964 mil 242.48 pesos de multa aplicada por el INE tras sus informes financieros del proceso local del año pasado; al mes recibe Raymundo King de la Rosa un millón 24 mil 718.41 pesos, recurso que hasta ahora no está claro el destino final.