Por: Jesús Amador
Chetumal.- En dónde andarán y qué pensarán aquellas personas que en el 2022 no creyeron en las palabras de la hoy gobernadora Mara Lezama cuando aseguraba que remodelaría el histórico y maltratado bulevar «Colosio»?, seguramente escondidos bajo la sombra del anonimato y asimilando – quizá-, su equivocación.
Y en verdad que esas voces discordantes tenían mucha razón para dudar de las palabras en aquel entonces Presidenta Municipal de Benito Juárez, porque varios actores políticos, desde alcaldes, diputados locales y federales, senadores, y hasta gobernadores, lo prometieron pero ninguno cumplió, algunos únicamente untaron un «caldo de frijol» (agua de chapopote) para argumentar que cumplieron, pero nadie solucionó la problemática que en temporadas de lluvia se recrudecia.
Pero Mara lo hizo, quién con la desconfianza de los cancunenses a cuesta, no se achicó y convirtió en prioridad el rescate del bulevar «Colosio».
Hoy en día, tras casi un año de construcción, es visible que Mara cumplió con la palabra empeñada, pero además aprovechó su cercanía con #AMLO para que Cancún tenga otras grandes obras que garantizan la movilidad, como el puente vehícular «Nichupte», el distribuidor vial en el aeropuerto y la continuidad de la avenida «Chac-mol».
Entonces, los quintanarroenses estamos viendo con hechos que Mara es una mujer de palabra, de compromiso, que siempre busca la forma para poder resolver algo por muy complicado que parezca.
Con lo observado, es un hecho que los «agoreros del mal» tendrán que esperar otros tiempos para llamar la atención.
Tiempo al tiempo…