Por: Jesús Amador
Chetumal.- Aun cuando él y sus «padrinos políticos» dan como un hecho su reelección como Presidente Municipal de José María Morelos (JMM) en las próximas elecciones (junio del 2024), el panorama no es nada alentador para Erik «Rebelde» Borges Yam, debido a que desde ahora los partidos aliados de Morena, llámese Partido Verde (PVE) y Partido del Trabajo (PT), han puesto en la mesa de negociaciones su intención por encabezar la alianza en citada demarcación.
Aún cuando en el ámbito estatal mencionada presidencia municipal no representa interés político y económico, como Benito Juárez (Cancún), Solidaridad (Riviera Maya), Tulum, Cozumel u OPB, desde hace varios meses ambos (PVE y PT) han expuesto motivos suficientes para pensar que JMM es su prioridad.
Primero fue el PT, quién a través de su delegada en Quintana Roo, Patricia Casados Pajin, ha hecho diversos eventos políticos-sociales, el último fue traer al diputado federal y uno de los aspirantes de Morena a la Presidencia de la República, Gerardo Fernández Noroña, al emblemático poblado de Sabán para «plazear» al alcalde Francisco «Xiximak» Puc como su virtual candidato a la presidencia municipal de JMM el próximo año.
El domingo pasado ocurrió algo similar, cuando el Secretario de Organización del CEN del PVE, Francisco Elizondo aprovechó un evento promocional de Claudia Sheinbaum para resaltar, una vez más, que el reconocido empresario, Luis Carrillo Góngora, es el «único gallo» del verde a la presidencia municipal de JMM para el 2024.
Ambas acciones ponen de manifiesto, tácita y categóricamente, que ambos partidos políticos (PVE y PT) no tienen ninguna intención de apoyar la posible reelección del «Rebelde».
Tal situación resultaría favorable para Morena cuando se siente en la mesa de negociaciones, tendría oportunidad de poner candidato (a) en otros municipios, donde la actividad económica es boyante o donde la gobernadora Mara Lezama tenga compromiso.
¿Alguien podría decirle a Erik Borges que ya es «cadáver político»?
Tiempo al tiempo…