Por: Jesús González
Chetumal.- Aún cuando desde al principio de la actual administración señalaron que el auditorio del bienestar era una obra mal hecha por el gobierno de Beto Borge, al final de cuentas Carlos Joaquín autorizó a la SINTRA acondicionarla para eventos deportivos y no para el C-5 como presumieron hasta hace unos días.
Una nueva mentira del gobierno del «cambio » queda al descubierto luego que el secretario de Infraestructura y Transporte, William Conrado diera a conocer que el llamado auditorio del Bienestar no albergará el Centro de Control, Comando, Comunicación, Cómputo (C-5) y por el contrario buscarán terminarlo para usarlo como dictaba el plan original.
Es decir, lo abrirán tras invertir una cifra aún sin cuantificar en su remodelación y construcción de las instalaciones no terminadas aunado al gasto de 9 millones de pesos por el pago de un estudio de mecánica de suelo que harán expertos de la Comisión Federal de Electricidad, según lo informado por el propio funcionario estatal.
Con esto desmintió la versión de la instalación del C-5 que el gobernador del Estado, Carlos Joaquín González en reiteradas ocasiones había anunciado y que supuestamente usaría el auditorio del Bienestar para ese fin y de esa manera mejorar las estrategias de seguridad que han sido el «talón de Aquiles » de la actual administración estatal.
Según el titular de Sintra, los 9 millones de pesos son para el estudio y una vez entregado el resultado analizarán el costo para una pared posterior, instalación de aire acondicionado, vías alternas de comunicación así como una planta de tratamiento de agua entre otras obras.
Además,William Conrado aseguró que no hay estudio realizado en cuanto a la resistencia y seguridad del auditorio y será mediante los resultados que emita la CFE cuando definan las acciones a seguir así como los costos que estas generen para finalizar la obra y abrirla al público.
Sin embargo, con estas declaraciones hechas este lunes, una vez más el titular de Sintra queda y deja en evidencia no solamente a su jefe el gobernador sino a otros integrantes del gabinete; en marzo de este año dijo que usarían 25 millones de pesos para el C-5 aprobados y etiquetados por el gobierno federal además de 70 mil pesos en mantenimiento mensual del inmueble.
También dejó en evidencia a su antecesor, Jorge Portilla Mánica quien en su momento dijo sobre un estudio hecho y que determinó la factibilidad del uso del auditorio aunque era necesario otras obras, además de desmentir ya sea por ignorancia o desconocimiento lo asegurado por Rafael del Pozo quien en agosto del año pasado informó que especialistas en la materia a nivel nacional y local hicieron un estudio, cuyos resultados fueron entregados a la PGR como parte de las denuncias realizadas contra el ex gobernador Roberto Borge Ángulo por el sobrecosto del auditorio cuyo valor fue más de 244 millones de pesos.