Jesús Pérez
Chetumal.- La resistencia que han mantenido grupos empresariales, políticos y ambientalistas desde hace más de cinco años, ahora tendrá sus repercusiones en el precio de los combustibles al tener Quintana Roo los precios más elevados del hidrocarburo comparados con los que existen en Yucatán y Campeche.
Esto, porque no se ha podido consolidar un proyecto para la construcción en territorio estatal, la infraestructura necesaria para el traslado y almacenamiento de combustible, incluida la turbosina que vendría de Valladolid Yucatán hasta Leona Vicario en el municipio de Benito Juárez Quintana Roo.
Lo que ocasionaría que los combustibles al reducirse su costo de transportación, bajarían sus precios al público incluida la turbosina al menos en 50 centavos lo que representaría una inversión mucho menor de lo que actualmente se paga por el combustible en la entidad a partir del 1 de enero del presente año y que ha generado manifestaciones incluso violentas en varias partes del país.
Sobre el tema el delegado de la Secretaría de Economía (SE) en el Estado, Luis García Silva, explicó que a diferencia de Yucatán y Campeche, Quintana Roo tiene los precios más elevados del combustible porque la distancia en el transporte del mismo lo encarece debido a los costos de envío a diferencia de los vecinos que su traslado y almacenamiento es más barato lo que se refleja en un precio menor; incluso de hasta 50 centavos que el volumen representa un ahorro sustancial.
El delegado federal recordó que desde hace algunos años se han propuesto proyectos por empresas mexicanas y extranjeras del ramo para la creación de ductos y centros de almacenamiento de combustible, entre ellos turbosina que es demandada en la entidad por la gran cantidad de vuelos que registra el aeropuerto intencional de Cancún. Esta red de distribución vendría de Valladolid Yucatán hacia Leona Vicario cerca del polo turístico y de allí se distribuiría a toda la entidad.
Otra de las propuestas es la posibilidad que buques tanques descarguen combustible en Puerto Morelos o Calica o utilicen redes de distribución submarina para almacenarlos en áreas especiales y de esa forma distribuirla; sin embargo ha existido resistencia y es un proyecto que desde hace dos décadas está detenido y ahora consideró que sería una forma de poder evitar elevar los costos del combustible a largo plazo.
Rechazo de ambientalistas.
Durante el 2012 se propuso impulsar el proyecto de Puerto Morelos, sin embargo la resistencia de diversos grupos ambientalistas entre ellos “Voces Unidas por Puerto Morelos” se opusieron argumentando daños al ecosistema y un riesgo para el entorno natural y la imagen turística del destino; lo que impidió que se lograran obtener las autorizaciones de impacto ambiental.
Debido a esa resistencia empresarios del ramo nacionales y extranjeros han desestimado el interés de invertir, aunque derivado de la actual situación por el aumento y liberación de los precios de los combustibles podría ser retomado pese a la renuencia de los grupos ambientalistas, e incluso políticos y empresarios locales del ramo que son beneficiados por el elevado costo de los hibrocarburos.