Por: Jesús Amador
Chetumal.- A pesar que hasta septiembre próximo rendirán protesta, los electos presidentes (as) municipales y diputados (as) federales de la alianza morenista deberán comenzar a definir con qué grupo político se la jugarán para la gubernatura de Quintana Roo el próximo año.
Tras el «albazo» político que en días pasados dio el senador, José Luis Pech Varguez, al resaltar que buscaría la gubernatura, el avispero al interior de Morena se alteró, a tal grado de «despertar» al grupo politico de Mara Lezama, el cual se encontraba en reposo luego de conseguir la reelección.
Hasta antes del domingo 7 de junio e incluso hasta el lunes 8, se daba por descontado que Yensuni Martínez (Othón P. Blanco), Mary Hernández (Felipe Carrillo Puerto), Erik Borges (José María Morelos) y Blanca Merari (Puerto Morelos) estaban comprometidos con el proyecto político de Mara Lezama, pero la osadía del «doctor» Pech Varguez está provocando el recuento de aliados a citado proyecto.
Vale precisar que además de esos cinco municipios (OPB, JMM, FCP, Puerto Morelos y Cancún), Morena ganó Cozumel (Juanita Alonso) y Tulum (Marciano Dzul), así como Lázaro Cárdenas (Emir Bellos) bajo las siglas del MAS. De esas tres demarcaciones, quizá la última pueda ser considerada como aliada al proyecto Marista ya que su dirigente, Cecilia Loria Marín, comulga con esos ideales. Pero no así la cozumeleña, Juanita Alonso, quien es una aliada del doctor Pech. Misma situación se percibe en Tulum, debido a que Marciano Dzul se le identifica con el grupo político de la senadora, Marybel Villegas Canché.
Es obvio que además de Mara Lezama y del senador José Luis Pech, en los próximos dias, semanas o meses conoceremos otros nombres de aspirantes a la gubernatura de Quintana Roo, uno de ellos sería del amigo de AMLO, Rafael Marín Molinero, así como el de otras damas. Pero los proyectos tanto de Mara como del «doctor» Pech ya caminan desde ahora, principalmente el de la primera, quien aprovechó el pasado proceso electoral para posicionar a sus «alfiles», como lo son los cuatro diputados federales: Alberto Batun, Anahi González y los «verdes», Laura Fernández Piña y Juan Carrillo Soberanis, respectivamente. Así como a las presidentas municipales Yensuni Martínez (OPB) y Mary Hernández (FCP). Y obviamente del dirigente estatal, Humberto Aldana.
Entonces, bajo esa perspectiva podemos presumir de que en breve el proyecto Marista comenzará a moverse al sur de Quintana Roo buscando conquistar el voto tozudo de los habitantes de la zona maya y pompeyenses, el cual sobra decir, que estos últimos han definido gobernadores, verbigracia la obtenida por Carlos Joaquín González en el 2016.
Falta menos de un año para celebrarse la «madre de todas las batallas» y no dudamos que desde ahora los maristas y el senador Pech Varguez realicen amarres con los grupos políticos y económicos que ambulan a lo largo y ancho de Quintana Roo, porque es más que urgente aterrizar y propagar su proyecto.
¿Será que en el diccionario de los presidentes (as) municipales y diputados (as) federales electos (as) se encuentre la palabra lealtad? Si es así, entonces podemos presagiar que la alcaldesa de Cancún lleva la delantera para conseguir la candidatura guinda a la gubernatura de Quintana Roo en el 2022.
Tiempo al tiempo…