Por: Jesús Amador
Chetumal.- No cabe duda que el horno político de Quintana Roo se encuentra a su máxima potencia y aún cuando las actuales condiciones políticas son diferentes a las vividas en el 2016, es casi un hecho que presenciaremos una «sangrienta elección» para elegir al noveno gobernador constitucional del Estado 30 de la República Mexicana.
En casi un hecho que el candidato del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y sus aliados, tentativamente el PT y PVEM, saldría entre el diputado federal, Luis Alegre Salazar; la presidenta municipal de Cancún, Mara Lezama o los senadores, Marybel Villegas Canche o José Luis Pech Varguez.
Pero en el bloque opositor a Morena, o mejor dicho, del gobierno estatal en turno (PAN) y los partidos restantes, llámese PRI, PRD, Movimiento Ciudadano (MC), Confianza por Quintana Roo, Movimiento Auténtico Social (MAS) y los que se sumen en los próximos meses, no tienen candidatos visibles o prospectos propios que cuenten con solvencia económica, así como carrera política y social, como para señalarlos con serias aspiraciones de obtener el triunfo el primer domingo de junio del 2022.
Tal situación ha provocado que «operadores y asesores políticos» del gobernador Carlos Joaquín y de los partidos políticos analicen perfiles de hombres y mujeres que gocen de buena reputación ante los quintanarroenses, que sus nombres sean sinónimos de triunfo y que ofrezcan más cosas positivas que negativas.
A la fecha, tal ejercicio ha logrado seleccionar un puñado de nombres de políticos (as) quintanarroenses entre los que podría estar el candidato (a) de una posible mega alianza en el 2022.
Pero entre todos esos nombres sobresale uno, el del diputado federal morenista, Jesús Pool Moo, quien en el 2018 ganó la elección y durante su larga carrera política ha ocupado grandes cargos públicos, principalmente en Cancún.
Es un ex priista que hoy en día defiende la franela guinda (Morena) y se auto proclama «AMLOista» a morir, pero seguramente esta consciente que sus posibilidades para ser el candidato de Morena a la gubernatura de Quintana Roo son mínimas y por ende se «deja querer» por la oposición.
Jesús Pool tiene amplia experiencia política, a pesar de fungir siempre como subsecretario de gobierno, desde el sexenio de Joaquín Hendricks Díaz ha desempeñado funciones de «vicegobernador» en la zona norte, a través de él la administración estatal logró la estabilidad política y social en el boyante Cancún, en los trienios de Juan Ignacio «Chacho» García Zalvidea; Gregorio Sánchez Martínez y Julián Ricalde Magaña.
Electoralmente falta menos de dos años para el relevo estatal, empero, en lo político, los partidos y alianzas apenas tendrán 18 meses (año y medio) para elegir a su candidato para disputar la gubernatura de Quintana Roo y eso lo sabe perfectamente Jesús Pool, quien en los últimos días ha sostenido reuniones con grupos afines a Carlos Joaquín en el centro y sur del Estado, así como con magistrados que forman parte de la nomenclatura del Poder Judicial en la entidad.
¿Será que Carlos Joaquín y los partidos ajenos a Morena y aliados se la jueguen con Chucho Pool?
¿Será que Jesús Pool obtenga el respaldo de los grupos políticos y económicos de Quintana Roo para ser el candidato de la «oposición»?
¿Será que la posible unción de Jesús Pool como candidato opositor sea únicamente parte del «circo» montado para favorecer al candidato oficial de AMLO y «palomeado» por Carlos Joaquín?
¿Cederá Morena ante la presión de Jesús Pool por ser el candidato de la alianza (Morena-PT-PVEM) para la presidencia municipal de Benito Juárez para el 2021?.
Tiempo al tiempo…