* Presenta exhortos para revocar concesión de Aguakan y obligar a CAPA a que verifique que el agua que suministra cumpla con la NOM-127-SSA1-1994.
CHETUMAL, 29 de septiembre.- La diputada Laura Beristain Navarrete presentó ante el Pleno un Punto de Acuerdo, mediante el que exhorta al Ayuntamiento de Solidaridad para que en ejercicio de su autonomía municipal y de la facultad conferida por la Ley de Agua Potable y Alcantarillado del estado de Quintana Roo rescinda la concesión del servicio de agua potable y alcantarillado con la empresa Desarrollos Hidráulicos de Cancún S.A. de C.V. (Aguakan).
Este servicio esencial no puede estar en manos de empresarios que lucran con algo que es vital para la los seres humanos. Basta de este negocio que atenta contra las familias quintanarroenses. Solidaridad no le va a ceder a la empresa Aguakan la concesión del servicio hasta el año 2053, porque el acceso servicio de agua es un derecho humano, afirmó.
Además, mediante otro Punto de Acuerdo, exhortó también a los ayuntamientos de Cozumel, Felipe Carrillo Puerto, Othón P. Blanco, Isla Mujeres, Benito Juárez, José María Morelos, Lázaro Cárdenas, Solidaridad, Tulum, Bacalar y Puerto Morelos, a la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado (CAPA) y a la empresa operadora Aguakan para que presten el servicio público de agua potable cumpliendo con la NOM-127-SSA1-1994.
Punto de acuerdo por el que se realiza un respetuoso exhorto al h. Ayuntamiento de solidaridad, quintana roo para que en ejercicio de su autonomía municipal y de la facultad conferida por la ley de agua potable y alcantarillado del estado de quintana roo, en su artículo 127; y la ley de los municipios del estado de quintana roo, en el artículo 66, fracción ii, inciso i).
Asimismo, la legisladora pidió también a la Secretaría de Salud del estado de Quintana Roo vigilar que la prestación del servicio de agua potable cumpla con los parámetros exigidos en los límites máximos permisibles establecidos por la NOM-127-SSA1-1994 y se apliquen los tratamientos para la potabilización del agua señalados en el numeral 5 de dicha norma.
Beristain Navarrete dijo que de no cumplirse con lo anterior, la Dirección de Protección Contra Riesgos Sanitarios del estado de Quintana Roo está ya obligada a emitir inmediatamente una alerta sanitaria en el municipio de Othón P. Blanco anunciando “agua potable no apta para consumo humano, su ingesta es perjudicial para la salud”, y posterior al análisis del agua en otros municipios, procederá a levantar la misma alerta, en los casos que sea necesario.
La diputada de extracción perredista explicó que el agua, tanto para el uso personal como doméstico, debe ser saludable; es decir, libre de microorganismos, sustancias químicas y peligros radiológicos que constituyan una amenaza para la salud humana, lo cual se ha comprobado, mediante pruebas de laboratorio hechas, que en Chetumal, el agua no es potable.
Agregó que los laboratorios ABC Analitic entregaron los resultados del análisis del agua que CAPA suministra, el muestreo se realizó en Chetumal, y quedó comprobado que no cumple con la calidad requerida para consumo humano. “Estos mismo estudios de van a realizar en los demás municipios, y CAPA y Aguakan se deberán ajustar a las normas. Hoy los quintanarroenses están pagando por agua que no es potable”, dijo.
El estudio realizado en Chetumal reveló que el agua que la CAPA suministra presenta problemas de dureza total con 932 mg/L (+432 mg/L), sólidos disueltos totales 476.50 mg/L (+76 mg/L) y sulfatos con 1,274 mg/L (+274 mg/L), que rebasan los parámetros fijados en la Norma Oficial Mexicana NOM-127-SSA1-1994, referente a “Salud ambiental, agua para uso y consumo humano-límites permisibles de calidad y tratamientos a que debe someterse el agua para su potabilización”.
Con todo, la diputada Laura Beristain subrayó que “el agua dura no es apta para el consumo humano, ni animal, tampoco para lavar ropa o cocinar. La Organización Mundial de la Salud recomienda que en aguas destinadas para consumo humano, el límite permisible no exceda de 250 mg/l; no obstante la NOM-127-SSA1-1994 lo estableció en 400 mg/l, pero CAPA está suministrando “agua potable” con una cantidad de sulfato por encima de dichos límites, lo cual la convierte en perjudicial para la salud, y por lo tanto, no es apta para el consumo humano”.