Chetumal.- Apenas diez meses duró la alianza política acordada entre el ex gobernador Mario Villanueva Madrid con el actual mandatario, Carlos Joaquín González, se presume que todo obedece a que el cozumeleño «abandonó» al chetumaleño en su titánica labor de ser recluido en el Cereso de esta ciudad y por no cumplir con los compromisos adquiridos antes, durante y después de ganar la gubernatura.
De manera inesperada, fiel a su costumbre, MVM fue claro y preciso en el comunicado que subió a redes sociales en las primeras horas de hoy. Habla de frente al Gobernador, Carlos Joaquín, le recuerda las infinidades de veces que lo ha dejado mal y su falta de empeño por apoyarlo para seguir purgando su condena en el reclusorio de esta ciudad.
Se puede calcular o imaginar la repercusión la tendrá este documento, en especial en el sur de Quintana Roo, porque fue escrito por una figura emblemática que a pesar de los años sigue gozando de la simpatía de miles de quintanarroenses.
No así en el costo mediático entre la clase política, porque al final de cuentas Mario Villanueva Madrid es para los chetumaleños como el «último mohicano»
A continuación reproducimos de manera íntegra el texto del ingeniero MVM:
«Alejamiento Político»
Esta es una buena definición del periodista por ser una expresión diplomática, aunque en este caso hay que ir al grano, decidí seguir mi camino al margen de ti y de tu Gobierno, Gobernador, por los motivos que aquí expongo:
Respecto a mi alejamiento de ti, el periodista anotó que declaraste lo siguiente:
«No sé, normalmente se trata siempre de espacios en gobierno de algunos temas que quedaron en el tintero desde atrás… pero vamos a seguir trabajando en bien de la población mucho más que en temas electorales».
Reitero Gobernador que pretendiste desviar la atención, pues sabes perfectamente que las razones de mi separación de ti no obedecen a espacios en tu gobierno ni a temas electorales.
Aclaremos: fui Gobernador y, como cualquier otro ex Gobernador sé que cuando uno asume el cargo necesita acomodar a sus personas de confianza y eso hace necesarios ocupar las posiciones disponibles, los que por lo regular nos parecen insuficientes, pero tu situación fue más complicada, pues te hacían falta posiciones para cumplir con tus compromisos con el PAN y el PRD, porque compartes con ellos el gobierno.
Consciente yo de tus limitaciones, a lo más que pude llegar fue a plantearte inquietudes de algunas personas que deseaban una oportunidad.
En cuanto a la campaña política, es cosa del pasado, pero antes que pedirte, te brinde la colaboración por medio de mi pluma y de mi hija que, como candidata a diputada, promovió tu mensaje de una nueva esperanza como transparencia, honestidad, combate a la corrupción y oportunidades para todos.
Si yo buscara beneficio, habría aceptado el ofrecimiento que me hicieron de una notaría pública y varios millones de pesos a cambio de retirarte mi apoyo y dárselo a tu competidor, el candidato Mauricio Góngora.
Estás arriba de la montura Gobernador y como bien dicen mis amigos charros de Cancún, Chetumal y el resto del Estado: «al jinete se le conoce arriba del caballo», así que te toca mostrar a la población tus habilidades como jinete.
Rechace esa oferta diciendo que mí pluma no se vende y que estaba contigo por la convicción personal de que tú eras quien Quintana roo necesitaba en el gobierno. Por cierto, cabe comentar que hoy, a nueve meses de tu administración, se están planteando algunas dudas sobre tú desempeño, y valdría la pena que las tomes en cuenta.
Quizá deberías pensar Carlos Joaquín que en mis condiciones de más de 16 años en la cárcel por delitos que no cometí, con más de 18 años fuera de mi hogar y un saldo de pérdida de la salud de mi esposa y mía, mi único y el más importante interés ha sido resolver mis problemas jurídicos y volver a casa y, mientras eso se logra, tratar de obtener las condiciones apropiadas de cárcel para darle atención a mi salud y estar lo más cerca posible de mi esposa y mis hijos.
Piensa Gobernador que con la enorme dimensión de mis problemas personales, carece de sentido jugar a la búsqueda de posiciones que sólo a ti te corresponde decidir.
Una cosa es dar opiniones políticas como lo hago, tratando de ser útil a la sociedad y otra cosa es el interés político en el poder, en participar en el gobierno. No tengo este interés.
Tal vez deba definirse lo que hago, como ser un aprendiz de comunicador social orientado al desarrollo político, económico y social de nuestro Estado, tarea ésta en la que deseo poner mis conocimientos y experiencias al servicio de la sociedad.
Bajo ese concepto, cabe añadir que si la campaña política fue de propuestas que nos entusiasmaron: honestidad, transparencia, etc.; estando ya en el gobierno te corresponde hacer efectivo lo prometido.
Estaremos pendientes, reconociendo lo que se haga bien, aceptando lo que no se pueda hacer, pero también expresando nuestra inconformidad y disentimiento sobre lo que se haga mal o se omita hacer sin justificación.
Estás arriba de la montura Gobernador y como bien dicen mis amigos charros de Cancún, Chetumal y el resto del Estado: «al jinete se le conoce arriba del caballo», así que te toca mostrar a la población tus habilidades como jinete.
Sobre los motivos del alejamiento
Bien, vayamos ahora a algunos motivos de mi separación de ti, para que las cosas queden claras.
Ante mi inminente regreso de los Estados Unidos, acudí a ti solicitando tu apoyo porque durante tu campaña política manifestaste simpatía por mis problemas y dijiste que me ayudarías. Además, pensé que había una buena relación personal entre tú y yo.
No obstante, aquí fue donde la puerca torció el rabo, porque solo he obtenido silencio tuyo y desprecio a mi persona y mis problemas, de lo que reconozco que me tardé en que me cayera el veinte y pagué de tarugo pidiéndote ayuda. Veamos las razones:
Primer Motivo
A mi regreso a México tenía que seguir preso y, sabiendo que en México era imposible hallar una cárcel como la prisión-hospital con todos los adelantos médicos, en la que estaba yo en los Estados Unidos, pensé que la mejor solución sería estar en la cárcel de Chetumal, del Gobierno del Estado, lo que me permitiría estar cerca de mi esposa y mis hijos para que me apoyaran en la atención de mi salud con los médicos de allí.
La posibilidad de traslado a esa cárcel está prevista en la Constitución Federal y las leyes relativas, por lo que para lograrse sólo se requería que tú gobernador estuvieras de acuerdo, porque es una cárcel dependiente de tu gobierno, y que dieran su anuencia las autoridades de la Secretaría de Gobernación porque soy un preso federal.
Por esas razones, con una persona cercana a ti y a mí te hice la petición de que hablaras con el Secretario de Gobernación diciéndole que estabas de acuerdo en que me trasladaran al reclusorio de Chetumal, y pidiéndole que autorizara el traslado.
Era un trámite relativamente sencillo, pero nunca hubo respuesta de tu parte a mi petición, de la que han pasado siete meses.
Segundo Motivo
Estando yo todavía en los Estados Unidos, por medio del secretario de Gobierno te envié un mensaje en el que, entre otras cosas, te decía que necesitaba que se hicieran algunas gestiones en la ciudad de México para tratar de encontrar las mejores condiciones posibles de cárcel en esa ciudad.
Las gestiones las haría Niza Puerto, pero como yo ya no tenía dinero, te solicite que, si estaba en tus posibilidades me auxiliaras con algunos gastos para pasajes y viáticos de ella.
Tampoco le diste respuesta a esa petición. Bien podías haber dicho que no había dinero y lo entendería, pero tu silencio refleja otras cosas.
Tercer Motivo
Quizá porque la necesidad es mucha, fui muy necio y, a pesar de lo anterior, un enviado mío insistió en pedirte, por medio de un colaborador tuyo, muy cercano que hiciera la gestión ante el Secretario de Gobernación para que me cambiaran de la cárcel donde estoy a un reclusorio en la ciudad de México. (Estoy en el Estado de Morelos).
La respuesta de tu colaborar fue que no era posible «porque en Gobernación no te hacían caso». A otro perro con ese hueso Gobernador. En principio, el Secretario de Gobernación está obligado a atenderte porque es el enlace formal del Ejecutivo Federal con todos los Gobernadores de los Estados.
En segundo lugar, ante una petición de carácter humanitario como la referida, lo menos que podría decirte es que tomaría en cuenta tu inquietud por apoyarme.
Una conclusión
La verdad es que si hubieras tenido interés en apoyarme, no sólo no habrías evitado dar respuesta a mis peticiones, sino que desde que llegué o, en cualquier momento (llevo aquí 5 meses), me habrías mandado algún mensaje preguntando en qué podías echarme la mano pero no ha sido así.
Nota: estas aclaraciones aún no concluyen, seguiré con la «Segunda parte» porque hay otras razones que motivan mi separación de ti y del gobierno, Gobernador Carlos Joaquín.
Mario Villanueva
Ex Gobernador de Q. Roo
Junio 26/2017