Por: Jesús Amador
Chetumal.- Hoy más que nunca estoy convencido que existen varios interesados que buscan extinguir al PRI en Quintana Roo, porque de otra forma no se explica quienes pudieron auspiciar los nombramientos de Manuel Díaz Carvajal y Judith Rodríguez Villanueva, como Presidente y Secretaria General de la dirigencia estatal, ya que ninguno de los dos representa a importantes grupos políticos, sociales o económicos de la Entidad.
Cuando la militancia tricolor exigía a todo pulmón un verdadero y democrático cambio de líder, surgió el clásico y acostumbrado dedazo que encumbró a los dos chetumaleños (Manuel Díaz y Judith Rodríguez), quienes a pesar de ser personajes de aceptada honorabilidad, carecen de las características requeridas para sacar del bache a la marea roja que viene dando tumbos desde el 2016.
A pesar de los desaguisados que tuvo en el pasado, Manuel Díaz es un hombre probo y goza de la confianza de la gente, es leal a sus convicciones partidistas, pero no cuenta con la popularidad, el léxico y el respaldo de las nuevas generaciones políticas para enderezar el barco tricolor.
La designación de la ex diputada Judith Rodríguez, también es cuestionada por la clase política quintanarroense porque es una dama con poca experiencia partidista y cuyo meteórico ascenso se le atribuye a su acercamiento al hoy candidato al senado, Raymundo King de la Rosa.
Y vaya que los pocos priistas inconformes tienen razón, ya que el supuesto cambio de dirigencia únicamente fue de nombres (Manuel Díaz por Raymundo King y Judith Rodríguez por Alondra Herrera), porque es el mismo grupo político que sigue controlando los destinos del PRI en Quintana Roo.
Pero en el pecado llevan la penitencia y seguramente, después del proceso electoral del primero de julio, veremos un verdadero cambio en la dirigencia Tricolor, uno que en verdad busque aglutinar las causas sociales de todos los sectores y organizaciones adheridas al citado partido, y que haga suya las demandas de los grupos sociales de todos los quintanarroenses.
Tiempo al tiempo…