Aun cuando en la sesión ordinaria de hoy, tirios y troyanos aplaudieron a los diputados de las bancadas del PVEM y PRI en la XV Legislatura porque votaron a favor de reformar varios artículos de la Ley de Seguridad Pública de Quintana Roo (para limitar los años de servicios de guardaespaldas e incrementar años de prisión a funcionarios públicos deshonestos), ahora tal acción parece que fue una treta premeditada con alevosía y ventaja.Si usted quiere mal pensar hágalo. Y es que en los corrillos políticos de Quintana Roo y, especialmente, en el sur del Estado dan por descontado que tales reformas no lograrán ser plasmadas en el Periódico Oficial del Estado (POE), es decir, que no se convertirán en ley.
Y hasta cierto punto es razonable el murmullo que hacen varios ciudadanos, quienes aseguran que tales reformas no alcanzarán su objetivo, tomando en cuenta la diferencia ideológica y política que existe entre el grupo del actual gobernador, Beto Borge y el electo, Carlos Joaquín González, pero, sobre todo, porque que el primero aún goza de supremacía al encabezar el Poder Ejecutivo hasta el 24 de septiembre, a las 23:59:59.
Dice el artículo 69 de la Constitución Política de Quintana Roo sobre esa facultad que detenta aún Roberto Borge: “Las iniciativas se sujetarán al trámite señalado en el Reglamento Interior de la Legislatura. Una vez aprobadas, pasarán al Ejecutivo para que en plazo no mayor de 10 días formule, si las hubiere, las observaciones pertinentes, o proceda a su publicación. En la interpretación, reforma o derogación de las leyes o decreto (sic), se observarán los mismos trámites establecidos para su formación”.
Por su parte, dice el artículo 70: “Se considera aprobado todo proyecto de ley o decreto no devuelto por el Ejecutivo en ese plazo, a no ser que durante ese término la Legislatura hubiese entrado en receso, en cuyo caso la devolución deberá hacerla el primer día de sesiones del período siguiente”.
Ahora, el artículo 71 establece que: “La facultad de veto del Ejecutivo se sujetará a las siguientes reglas: I.- Todo proyecto de ley o decreto desechado en todo o en parte por el ejecutivo será devuelto (sic) con sus observaciones a la Legislatura, quien lo discutirá nuevamente (sic) en la parte conducente. II.- De ser confirmado el proyecto original, por las dos terceras partes de los miembros de la Legislatura, esta será ley o decreto y devuelto al Ejecutivo para su publicación, y III.- Si la Legislatura aprobase, por la misma mayoría calificada, en parte o todas las observaciones hechas por el Ejecutivo, se le devolverá para (sic) los efectos de la fracción anterior.”
Visto así, el verdadero panorama es oscuro para los diputados que dan por descontado que se revertiría la tan sonada reforma donde se incrementó, de manera indiscriminada, el número de años de seguridad que gozarían los servidores públicos.
Y no necesariamente hay que ser brujo o pitoniso para presumir que el actual mandatario buscará cualquier defecto de la iniciativa para vetarla y regresarla al Poder Legislativo. Pero eso sí, seguramente, agotará el plazo de los diez días que le concede la Ley. Oséase: la hará llegar minutos antes del 25 de septiembre cuando este entregando el poder.
Se valen las apuestas…
Pepe de la Peña frena el excelso y marcado protagonismo de Emiliano Ramos
Bien dicen que antes de hablar hay que pensar muy bien lo que quieres expresar porque de lo contrario corres el riesgo de que te exhiban públicamente como ocurrió el martes pasado al diputado perredista, Emiliano Ramos, cuando su colega del Partido Verde, Pepe de la Peña, le refutó en la máxima tribuna legislativa.
Y no era para menos porque en su desesperación por ganar reflectores el buen Emiliano Ramos metió las cuatro patas. En un punto de acuerdo que estaba promoviendo, pretendía con toda osadía y soberbia pasarse de listo por encima de la lógica ciudadana e institucional, echar abajo el nombramiento y permanencia del auditor estatal Javier Zetina González, e inmediatamente dar golpe de timón con la elección del nuevo auditor. ¡Astuto el muchacho!
Pero, Pepe de la Peña lo agarró en la maroma y le refutó que tal planteamiento estaba mal fundamentado; que él y su bancada propondrían analizar el nombramiento del citado auditor y que, al término del análisis, y solo entonces, determinarían si en verdad es necesario cambiar al servidor público que, para azules, amarillos y de todos los colores, parecería que es la obsesión del benjamín de los Ramos.
No cabe duda que hay varios diputados en la actual legislatura que deberán trabajar horas extras para no pasar de noche o en su defecto, no defecarla tan feamente, como le ocurrió al joven desesperado que lidera a la bancada perredista.
Eduardo Martínez Arcila pone de manifiesto contar con “tablas políticas” para dirigir el Poder Legislativo
Aun cuando hasta los diversos grupos políticos del PAN han manifestado escepticismo ante la capacidad de maniobra de Lalo Martínez, como presidente de la Gran Comisión, habrá que ser francos y aceptar que durante las primeras cinco sesiones ordinarias, ha dado muestra de madurez política acorde a las circunstancias cambiantes, tirantes y sorprendentes.
El martes pasado, por ejemplo, tomó la tribuna para mediar entre sus colegas de las diversas fracciones parlamentarias que se estaban dando hasta con la cubeta por un tema de la menor trascendencia. Luego, en la sesión de hoy jueves, volvió a usar el micrófono para exigir al Periódico Oficial que publiquen las reformas a varios artículos de la Ley de Seguridad Pública a fin que puedan entrar en vigor.
Es obvio que al buen Lalo Martínez le falta un buen trecho por recorrer, pero puede sentirse satisfecho y sus adversarios seguirán esperando el tan ansiado resbalón que añoran.
El diputado independiente, Juan Carlos Pereyra, pinta para ser el moderador de la actual legislatura
Llegó a la XV Legislatura bajo las siglas del tricolor, pero el panorama político actual lo orilló a tomar la decisión de declararse diputado independiente, pero conserva la esencia que traen los jóvenes políticos quintanarroenses: servir a la sociedad.
El representante de Playa del Carmen sabe que su actuar como legislador será crucial para que tanto el Poder Legislativo como Ejecutivo logren cumplirle a los quintanarroenses.
En estas primeras sesiones Pereyra Escudero ha dejado claro que por encima de ideologías partidistas su prioridad será apoyar cualquier iniciativa o propuesta que beneficie a la sociedad.
Una ganga ($) fue más que suficiente para calmar a los “morenos”
Mientras el inerme, pasmado y pasmoso José Luis Pech Varguez jura y perjura que MORENA no se vende al mejor postor y que sus apóstoles, perdón, sus diputados, defenderán los intereses del pueblo, lo cierto es que hemos observado que sus dos representantes en la XV Legislatura han hecho de todo, menos trabajar en favor de la ciudadanía o del proletariado pejista.
Tal parece que al buen amigo Ortiz Vallejo ya se le olvidaron los compromisos partidistas y ahora únicamente se dedica a ser comparsa de la mayoría legislativa. Obvio, el hombre no tiene un pelo de tonto, porque sabe por dónde sonarán más fuerte los chelines.
Son varios quienes rezan a “San Joaquín”
Directores y directoras de las diferentes áreas del Congreso que aparecen en la foto con sonrisa compungida porque sus días están contados. Muchos de ellos nunca entendieron ni ejercieron el papel para el que fueron nombrados. Hoy, todos quieren quedarse para seguir viviendo de un presupuesto que se va a reducir.
Bajo las órdenes de muchos de estos directores, hay ejércitos de subdirectores y jefes de departamento que son iguales o peores que sus jefes: no tienen experiencia, muchos no trabajaron en el Congreso desde hace varias Legislaturas, pero cobraron a manos llenas salarios y bonos, y tuvieron coches, viáticos y boletos de avión a manos llenas. Pocos de esos funcionarios se quedarán porque hay quienes no solo trabajaron bien sino que tienen tablas y prestigio reconocido. Eso lo saben bien los trabajadores del Congreso y a ellos deberá consultar el presidente de la Gran Comisión para no cometer una injusticia con un personal bien calificado.
Dejará Melissa Verduzco la Oficialía Mayor?
No cabe duda que no existe una persona más angustiada por quedarse en la nómina del Congreso, que la aún Oficial Mayor, Melissa Verduzco, lo cual pocos entienden, ya que ella siempre dijo entre fanfarronerías y humillaciones que no necesitaba trabajar y que goza de las mejores relaciones en el PRI para tener las mejores plazas.
En el Congreso, luce hoy sus mejores galas para diferenciarse de los demás. No ha perdido el gusto para imponerse. Pero, a nadie engaña, porque todos saben que su intención es quedarse para seguir dañando con su información y malas artes a quienes ella considera sus enemigos: el gremio de periodistas, las personas que le hacen sombra en sus planes y todos aquellos que no se hincan para besarle los pies.
Sin embargo, la razón más importante que la impulsa a quedarse es que durante el tiempo que ella ha sido oficial mayor, la nómina del Congreso se multiplicó como nunca. Pero, no fueron los diputados los causantes de esa inflación sino que ella que les dio plazas a discreción a amigos, a lambiscones y a familiares suyos y de su ex esposo. Los números, las fechas y los salarios no engañan. Ahora la XV Legislatura tendrá que revisar por qué el Congreso es un aeropuerto más grande que el de Chetumal.