Jesús González
Chetumal.- La tensión crece en la frontera Sur entre México y Belice desde hace varios días y este jueves estuvo a punto de estallar una batalla campal entre policías de esa nación y habitantes de la localidad de Subteniente López conocidos como “fayuqueros” cuando las autoridades vecinas intentaron decomisar “pacas” de ropa que provenían de esa nación hacia el lado mexicano.
Esto dejó como resultado al menos 13 personas heridas, entre ellas un policía de Belice luego de liarse a golpes con los “fayuqueros” quienes los acusaron de querer robarle la mercancía que habían comprado en la zona libre de Belice, lo que suscitó el enfrentamiento que duró más de 10 minutos.
Según versiones de quienes dicen ser comerciantes en pequeño, las autoridades de Belice sobrepasaron el límite fronterizo fijado a la mitad del llamado “puente viejo” que sirve de entrada hacia esa nación con el objetivo de decomisar los artículos al asegurar que habían excedido el límite permitido; esto calentó los ánimos y en medio de empujones y amenazas de iniciar la gresca hubo intercambio de algunos golpes e insultos.
Los “fayuqueros” quienes en su mayoría tenían el rostro cubierto con pañuelos usaban su celular para grabar a los policías beliceños y en diversos tonos les decían que no podían ingresar a México de esa y decomisar la mercancía.
Tras verse superado en número, los policías beliceños intentaron sacar sus armas de fuego pero al verse grabados y que los jóvenes no se replegaron sino por el contrario enfrentaron de manera más directa decidieron suspender esa acción y tratar de dialogar; sin embargo no fueron escuchados y aunque cesó en enfrentamiento la tensión se mantuvo por varios minutos.
Incluso el puente internacional entre México y Belice fue cerrado cerca de tres horas sin que las autoridades mexicanas intervinieran dando muestra una vez más de la impunidad y corrupción que impera en esa zona que sirve como pasó del tráfico de todo tipo de productos legales o no.
Varios de los “fayuqueros” aseguraron que son constantes los acosos de los policías beliceños a la gente que compra en la zona libre y que están cansados, por lo que sentenciaron que no detenerse pudieran llegar a un conflicto mayor donde toda la población de Subteniente López podría apoyarlos y con esto derivar no solo un hecho violento sino de carácter diplomático entre dos naciones.