Por: Jesús Amador
Chetumal.- No cabe duda que la simulación y doble lenguaje persiste en el PRI-Quintana Roo y ahora sus contados militantes «pegarán el grito al cielo» cuando se enteren que la ex integrante de la décima-cuarta legislatura, Judith Rodríguez Villanueva, encabeza la lista de candidatos a diputados plurinominales.
Seguramente los «dinosaurios», la «sangre joven» e incluso hasta los nuevos priistas cuestionarán la colocación de Judith Rodríguez como la titular de la primera fórmula en la lista del PRI a la diputación local.
Y tendrán razón en descalificar o estar en contra de posible designación, porque se presumía que ante los catastróficos resultados obtenidos en el 2016 y 2018, el «nuevo PRI» tomaría en cuenta a su escasa militancia para elegir a sus candidatos y otorgaría las plurinominales a
dirigentes de sus organizaciones adheridas que en verdad hacen trabajo proselitista.
Pero Judith Rodríguez carece de ello, su «extraordinaria» y meteórica carrera política la hizo bajo la sombra del Borgismo, porque el ex gobernador Roberto Borge a designó secretaria de finanzas del PRI estatal y en el 2013 la convirtió en diputada suplente de la XIV legislatura y asumió la titularidad de la misma cuando Cora Amalia Castilla Madrid solicitó licencia.
En septiembre del 2016 se reintegró a la dirigencia tricolor y meses después, de manera por demás amañada, se convirtió en presidenta del Organismo Nacional de Mujeres priísta (ONMPRI) y ante la salida de Alondra Herrera, paso a ocupar la secretaria general del CDE del PRI.
Entonces, como se puede apreciar, Judith Rodríguez Villanueva carece de un verdadero trabajo partidista que le permita acceder a enorme encomienda o distinción.
Qué dirá Manuel Díaz Carbajal al respecto? Será que el PRI en verdad quiera hacer bien las cosas o seguirá secuestrado por intereses personales?
Tiempo al tiempo…