Por: Jesús Amador
Cancún.- Toda la razón tiene la senadora, Marybel Villegas Canché, al reconocer que será la dirigencia nacional de Morena, la quién defina los nombres de sus candidatos que competirán en la elección del 2021 y ante tal tenor, obligadamente, nos recuerda la forma en que el PRI dominó la política nacional por más de 6 décadas, donde el «ungido» (elegido los dioses) era la persona idónea para cuidar los intereses partidistas, y no necesariamente, los del pueblo.
Hasta ahora en Quintana Roo desconocemos a detalle la forma en que Morena elegirá a sus candidatos para el 2021, de antemano se deduce que utilizarán el mismo método del 2018, aunque en esta ocasión la «locomotora AMLO» no aparecerá en la boleta electoral, y ahora sí, los candidatos deberán contar con un «pistón externo» para adjudicarse el triunfo.
Hoy en día las cosas lucen diferentes, a pesar de los resultados positivos que tuvieron en las elecciones del 2019 (diputaciones locales), Morena no puede darse el lujo de perder espacios porque nos encontramos en la antesala de la gubernatura.
De entrada a Marybel Villegas debemos reconocerle su finisimo olfato y habilidad politica. Sin el afán de ofender a ninguna otra mujer quintanarroense, no veo otra dama con el cúmulo de experiencia que trae a cuesta la citada senadora, pero una cosa es experiencia y otra es resultados, y estos no se le pueden medir en su justa dimensión en los dos años que lleva como integrante de la Cámara Alta.
Todo lo contrario sucede con su adversaria en turno, Mara Lezama, a quién busca arrebatarle la candidatura de la alianza de Morena a la presidencia municipal de Benito Juárez (Cancún) el próximo año, porque el trabajo de mencionada política es escrutado de manera cotidiana por cancunenses y visitantes que exigen servicios y seguridad propias de un polo turístico de primer nivel.
Amén a esas adversidades, en los últimos meses la alcaldesa de Cancún ha enfrentado un vendaval de situaciones «extraordinarias», capaces de derribar o hacer trizar cualquier proyecto de gobierno, como el caso de la basura (SIRESOL), el tema de la «casa blanca» y el último, la represión a las mujeres manifestantes, pero hasta ahora sigue vigente.
Entonces, es obvio que Marybel Villegas tiene la ilusión y quizá el compromiso de algún grupo político en la élite morenista que la impulsa a buscar en primera instancia la presidencia municipal de Cancún y resultado válida la aspiración, pero enfrente tiene a Mara Lezama que además de gozar de una verdadera amistad con Andrés Manuel López Obrador (AMLO) -ojo, no con el Presidente de la República-, ha mediano y enfrentado mayúsculos problemas que no cualquier político hubiera logrado superar.
Pero insistimos, y coincidimos con lo expresado por Marybel Villegas, que será el CEN de Morena quien defina el nombre del candidato, pero a como hemos visto las cosas, es casi seguro que Mario Delgado siga la «línea» que dicten de Palacio Nacional.
Y en tal escenario, sólo existen dos posibilidades:
1.- Que «San AMLO» siga apoyando a su amiga Mara Lezama como lo ha hecho hace desde hace más de una década y avale su reelección.
2.- O que los poderosos amigos que tiene la senadora Marybel Villegas en el primer círculo de Morena «exigan» y pongan sobre la mesa, como prioridad, la candidatura a la alcaldía de Cancún.
¿Será que los quintanarroenses, de manera especial, los cancunenses veamos una feroz lucha por la candidatura
Tiempo al tiempo…